Me dirijo a todos mis asiduos y muy consecuentes lectores de esta ya casi terciaria columna, para invitarlos a cerrar filas en contra de la situación actual, que no la especifico con mayores detalles por cuestiones de seguridad interna y para evitar que a alguien se le ocurra pensar que estamos tramando algo que esté en contra de las normas internacionales de buena conducta y comportamiento y me quiten la nacionalidad.

Aquellos que estén de acuerdo y se decidan a seguir los pasos de nuestros gloriosos ancestros de la republica cero, es decir cuando éramos dignos súbditos de la madre patria y podíamos celebrar orgullosamente las nupcias de algún infante de la casa real, aun cuando fuese a muchas leguas marinas de distancia, les paso de inmediato de dar las instrucciones que deben seguir, al pie de la letra, y las cosas que deben tener disponibles para unirse a esta libertadora empresa.

Ante todo deben solicitar el permiso correspondiente a sus señoras madres, esposas, novias o concubinas -por cuestiones de seguridad y orden no se permiten damas ni aquellos que se le parezcan-. Deben tener al día la cédula de identidad, pero la nueva, no la de la cuarta, es decir aquella que haya sido otorgada en alguna Van o alguna oficina no pública. Presentar la tarjetita dada por Súmate como constancia de haber firmado y si es posible copia de la planilla donde estampó su firma y su huella, no importa si plana. Hablar perfectamente cachaco o similar. Deben traer una muda de ropa compuesta de un pantalón y camisa de camuflaje, sin estrenar, un par de botas de vaqueta también sin estrenar y pulidas, una gorra tipo militar o del Magallanes. Tener perfecto conocimiento de las zonas de protección ambiental. Poder mantener una dieta de cachitos de jamón o de queso por varios días. Conocer, al menos de nombre, a algún guarimbero o a alguien de la llamada plaza de la libertad, vulgo Altamira y oficial Francia. Estar dispuesto a pernoctar en fincas o haciendas cercanas a ciudades importantes en municipios gobernados por gente de la oligarquía. Podrán traer foto tipo carné de algún familiar o en su defecto del Che o de Bus, el de la doble v, menos de la Varela. Una copia de la Biblia, del Corán o de la Bicha o un compendio escrito por el canciller.

En vista del cambio de salario mínimo y el aumento del costo de la cesta básica, se les darán cesta ticket canjeables en cualquier panadería de la zona y un bono adicional, en cualquier moneda andina de su preferencia, una vez que terminen las operaciones, siempre y cuando las mismas sean llevadas a cabo sin interferencia de policía municipal alguna. El entrenamiento será dado por expertos invasores de Bahía de Puercos y de Machurucuto y algunos sobrevivientes del Porteñazo, Carupanazo y Barcelonazo. Tendrán posibilidad de hacer una llamada, una sola, o bien al programa Alo Presidente o al Alo Ciudadano, pero no necesariamente se les obligará a oír completo ninguno de esos dos programas. Queda terminantemente prohibido traer armas de cualquier tipo. Ni rifles, ni escopetas, ni chinas, fondas u hondas, tampoco navajas o corta uñas y mucho menos picos de botella. Queda entendido igualmente que si por cualquier razón, incluido problemas de orden atmosférico, haya que suspender este entrenamiento no tienen nada que reclamar ni por este ni por ningún otro concepto, y que todo daño, herida, quemadura o cualquier tipo de infección , enfermedad o trastorno patológico será considerada leve. Si usted, amigo lector, cumple con estos requisitos y está interesado en coger la montaña puede dirigirse a la siguiente dirección electrónica: bloquedemocrático@comandoayacucho.com .

PD: A mis consecuentes lectores les ruego me disculpen este desvarío, pero la situación actual ha bloqueado totalmente mi capacidad de análisis y raciocinio. Espero, por supuesto, que esto sea temporal y a muy corto plazo pueda salir de este slump mental y retornar a mis cabales. Gracias.

Iolaizola@cantv.net